LONDRES -- Miércoles feliz para Rafael Nadal en el 02 Arena de Londres. En el Grupo Ilie Nastase, el español venció a Andy Murray por 6-4 y 6-1 para alcanzar su segunda victoria en igual cantidad de partidos en las Finales ATP. Más tarde, el triunfo de Stan Wawrinka sobre David Ferrer por 7-5 y 6-2 le dio el pasaporte a semifinales al ex-Nº1 del mundo.
En la apertura de un gran miércoles, el primer set fue bien parejo, pero con una leve inclinación para Nadal, que obligaba a games largos en el servicio de Murray, que lograba sobreponerse a tiempo para seguir en partido. De hecho, el escocés aprovechaba su única chance de quiebre en ese parcial, mientras que Nadal concretó 2 de 7. Claro, esa situación hizo que el español pueda llevarse el primer set por 6-4.
Ya en el segundo, Murray prácticamente no opuso resistencia, hizo notar su preparación en arcilla con vistas a la Davis, duplicando sus errores no forzados en relación a sus tiros ganadores: 29 a 15. Así, se vio superado ante un Nadal mucho más enfocado y cometiendo menos errores que en su gira previa, donde sumó victorias aunque con mayor sudor.
Nadal había terminado con muy buenas sensaciones su primer partido ante Wawrinka. El manacorí superó en sets corridos al suizo y ya se había en una situación muy favorable dentro de su zona. Y lo confirmó luego, asegurándose el pasaje a semifinales en el torneo final del año por quinta vez sobre siete participaciones.
Con todo lo que implicó aquella victoria, luego de su derrota en París ante el mismo rival, aparecía el escocés, vigente número 2 del ranking de la ATP y líder del equipo británico que jugará la próxima semana la final de la Copa Davis frente a Bélgica, en una situación compleja por su preparación sobre clay. Y así le fue en su duelo contra el español.
El antecedente más inmediato entre Nadal y Murray se remitía a Madrid, donde Murray demostró que jerarquía y gran momento y se impuso por 6-3 y 6-2 en el propio país del español. Esta vez, hubo desquite. Además, Nadal sumó su victoria Nº60 en esta temporada, lo que consiguió por octava vez en un año.
Ya en segundo turno, Wawrinka dio vuelta un choque casi increíble ante Ferrer, quien con dos caídas en sus dos partidos se despidió de la ilusión de ser semifinalista, más allá de que le pueda ganar el viernes a Nadal. Por su parte, Rafa necesitaba, para ya pasar de ronda, que ganara el suizo o bien que lo hiciera su compatriota pero en tres sets. Y la sonrisa final fue del exlíder del circuito ATP, gracias al éxito de Wawrinka por 7-5 y 6-2.
En la cancha, el que pegó primero fue Ferrer, con un quiebre en el cuarto juego. El helvético dispuso de una ocasión de rotura en el séptimo game, sacando el español 4-2, pero mantuvo Ferrer para adelantarse 5-2. El español, inclusive, sirvió 5-3 y 40-30, pero justo allí cometió una doble falta y desaprovechó su único punto de set. Desde entonces, todo se revirtió, porque el suizo fue más regular y punzante.
Empezó a ser agresivo el ganador, pero más equilibrado, sin descontrolarse, a la vez que se mostró pasivo y muy cauteloso el español, cediéndole a su peligroso adversario la chance de impactar cómodo y ser dominado. Fue tremenda la remontada de Wawrinka, que con cinco juegos en fila, en gran nivel, se metió el set inicial en el bolsillo. En ese momento, ya Nadal festejaba en el hotel su boleto a semifinales.
La tendencia continuó en el comienzo del siguiente set, con otro quiebre de Wawrinka, ya en el primer juego, sumando tres rompimientos consecutivos. Y se puso 2-0, ganando así siete juegos al hilo. Pese a alguna duda puntual, el suizo terminó sellando un triunfo clave para sus aspiraciones. Así, quedó con marca 1-1, igual que Murray, y justamente ambos definirán entre sí, este viernes, al segundo clasificado de este grupo.
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