PARÍS -- Sábado de finalísima en Roland Garros. La rusa Maria Sharapova, ex Nº 1 del mundo y ahora 8ª, figura como 7ª cabeza de serie y enfrenta a la rumana Simona Halep, la Nº 4 del listado de la WTA. La primera ya ganó una vez cada uno de los cuatro Grand Slam y la segunda juega recién su primera final en un 'Major'.
Se trata de una final especial en el Abierto de Francia, entre la siberiana, atracción por lo que gana y lo que genera en contratos por su gran figura, y la rumana, quien ya se aseguró meterse por primera vez en el podio al ser la 3ª del mundo el próximo lunes.
Ellas llegan por diferentes vías a la gran definición, ya que la rusa sufrió en los tres últimos encuentros, en los que cedió el primer set, y la rumana ganó los seis partidos en dos parciales. Justamente, Paola Suárez, en su blog de ESPNtenis.com, dijo que ve como favorita a Halep, siempre y cuando los nervios no la traicionen.
Sharapova, de 27 años, supera en experiencia a Halep, de 22, y también en los enfrentamientos personales. La rusa está 3-0 en el historial, ya que la venció en 2012 en Indian Wells y Pekín y la única final y duelo entre ambas en clay se dio el mes pasado, en Madrid. Allí la siberiana perdió su primer set ante la rumana al triunfar por 1-6, 6-2 y 6-3.
Eso demuestra, como viene ocurriendo en París, que si bien no empieza los choques en su mejor nivel, la ex líder mundial se recupera mental y tenísticamente, arriesga y termina siendo la dominadora. Esta vez, se trata de un rival que llega en su mejor momento, veloz, precisa y sólida.
"No importa quién esté del otro lado de la red. Es una gran oportunidad para las dos y voy a estar ahí hasta el último punto", declaró Sharapova, que espera consagrarse en el estadio Philippe Chatrier, como ya lo hizo en 2012.
La rusa está por primera vez en su carrera en la tercera final seguida en el mismo Grand Slam. Esta es su novena definición en los grandes certámenes, con marca de 4-4, por lo que quiere quedar con registro positivo. Ya se aseguró subir al 6º puesto del ranking y, si festeja el título, se ubicará 5ª.
"Ella tiene un juego muy sólido. Es una oponente muy física. Contra ella, siempre son partidos muy físicos y tienes que estar preparada para jugar el tiempo que haga falta para ganar el partido", comentó la rusa, radicada desde niña en Estados Unidos, dueña de 31 títulos en singles.
Halep se consagró en Roland Garros como junior en 2008 y ahora va por la hazaña máxima entre las profesionales. Saltó a la elite en 2013, con sus seis primeros títulos WTA y terminando la temporada en el 11º lugar del ranking. Ahora acumula siete coronas individuales.
"No tengo nada que perder y voy a mantener ese espíritu. Voy a intentar golpear relajada. Sé que va a ser difícil gestionar mis emociones en ese momento", resumió la que ya es la mejor jugadora de Rumania por ubicación en el ranking. Ahora está a una sola victoria de igualar la hazaña de su representante, Virginia Ruzici, campeona de Roland Garros en 1978.
"Aunque sea de otra generación, sigo teniendo hambre", avisó Sharapova, mezclada entre grandes apariciones y ahora con el desafío de tener enfrente a una Halep en firme escalada. La gloria está a un paso. Tan cerca y tan lejos, a la vez.
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